El poemario está descansado, ya habrá tiempo de pensarle un nombre adecuado, arreglos y demáses, ha costado más sangre de la que esperaba, pero de toda batalla se aprende. Ahora toca un tiempo de no producción poética, es lo que ha sido las últimas semanas y no sé cuánto más estaré así, no mucho creo. Pues, qué más decir. Sí ya de eso, del cierre del canal venezolano, acontinuación mi opinión:
El caso de Venezuela es un claro caso de la dependencia del público a sus medios, está un hipótesis que dice que en aquellas sociedades que posean sistemas desarrollados de medios, la dependencia del público, frente a la información, aumenta a medida que también aumenta el nivel de inestabilidad estructural (conflicto social y cambio). También está la hipótesis, de que cuanto mayor sea la cantidad y el centralismo de los servicios de información que aporte un medio, mayor será la dependencia que el público tendrá de este medio. Es decir, el público hechará de menos las telenovelas de ese canal, que ya estaba acostumbrado.
Según sé la teoría funcionalistas de los medios, y como tema subsecuente la teoría de la dependencia, no toma encuenta los medios alternativos de comunicación y su efecto en su público. Pero acá se evidencia además, la formación de actitud, la activación del público, mejor dicho el poder de convocatoria que como medio de masas tiene ese canal, y haga acciones de calle junto con organizaciones sociales venezolanas como métodos de presión, que no creo que consigan mucho.
Pues no estoy en Venezuela, pero por mí que cierren ese canal.Por mi parte seguiré estudiando para mi parcial de mañana.
No sé escribir lo que supe decir algún día, pronto sabré decir otras cosas que aún no he dicho... ya pasará eso es todo.
lunes, 28 de mayo de 2007
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1 Comentarios:
Exacto, no es en sí que vayan a cerrar el canal o que ya lo hayan cerrado lo que provoca la reacción de la población, sino la programación con la que tenian acostumbrada a la población, que por cierto era muy mala en terminos generales. Como aspirante a periodista no estoy de acuerdo con el cierre de cualquier medio de expresión sin la necesidad de oir la innecesaria magnificación que el caso haya tenido acá, pero si el proyecto gubernamental de T.V es mejor de lo que fue esa patraña de canal, pues Bendito sea el Señor.
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